La Audiencia Provincial de Las Palmas celebra este miércoles el juicio contra un hombre, C., de nacionalidad belga, para el que la Fiscalía solicita una condena de 18 años y cinco meses de prisión por sendos delitos continuados de abusos sexuales a sus dos hijos, presuntamente cometidos en el municipio de La Oliva.

La Fiscalía señala en su escrito de acusación que el hombre, en una fecha cercana al año 2000, cuando su hijo contaba con siete años, efectuaba tocamientos al menor en la ducha. El acusado “masturbaba a su hijo”, le “incitaba para que le masturbase” y a que le practicase sexo oral, “con el consiguiente quebranto para su integridad e indemnidad sexual”.

En la misma época, cuando su hija contaba unos seis años, “y al menos durante dos años”, profirió “reiterados tocamientos en sus partes íntimas a su hija, llegando a introducir los dedos en su vagina en la mayor parte de las ocasiones”, señala la Fiscalía.

Los citados abusos, añade el Ministerio Fiscal, “sucedieron casi todos los días durante dos años” en el domicilio, en Corralejo, “siempre a la hora de la siesta”. La Fiscalía apunta que el acusado la obligaba a que le masturbara.

El Ministerio Fiscal subraya que el acusado “se valió de la relación paternofilial existente”, así como “del temor que su figura encarnaba con el fin de facilitar que los menores prestasen su anuencia a participar en los actos sexuales descritos”.

La Fiscalía solicita, además de la pena de prisión, la prohibición de aproximarse a sus dos hijos, a su domicilio, lugar de trabajo o cualquier lugar frecuentado por ellos, a una distancia inferior a 500 metros, así como de comunicarse con ella por cualquier medio durante un tiempo de 20 años.

Según la Fiscalía, el acusado tendría que indemnizar con 10.000 euros a su hijo y con 50.000 euros a su hija en concepto de responsabilidad civil.