El Cabildo de Fuerteventura ha finalizado el proyecto de restauración de la Ermita de San Isidro de Triquivijate, unas labores ejecutadas gracias a un convenio suscrito con la Diócesis de Canarias para la conservación del patrimonio cultural de titularidad eclesiástica de la Isla con la categoría de Bien de Interés Cultural (BIC).

El arquitecto encargado del proyecto, Francisco Cabrera, ha presentado los resultados de los trabajos, en un acto al que asistió el presidente del Cabildo, Marcial Morales, el alcalde de Antigua, Juan José Cazorla, y el vicario de la Diócesis de Canarias, Hipólito Cabrera.

Según Francisco Cabrera, la finalidad de la intervención ha sido la consolidación de varios elementos del templo de Triquivijate, estabilizar su estado y asegurar su conservación a largo plazo, evitando que continúe su deterioro.

"De esta manera, se mantiene el inmueble en las mejores condiciones posibles, con el fin de conservarlo y ofrecer una mejor imagen a todos aquellos que residen en la Isla o la visiten", explicó Morales.

El muro exterior del templo o barbacana se encontraba afectado por inclinación. Los trabajos realizados han permitido mejorar las condiciones de la base del mismo, hasta conseguir la estabilidad y el aplomado original.

Durante la actuación se han estabilizado además los elementos de la cubierta de la Ermita, con el saneado de la base para ubicar una nueva impermeabilización, así como la posterior colocación de los elementos antes retirados, manteniendo la imagen primitiva del inmueble.

Se han consolidado también los elementos de la espadaña, reparando la cantería afectada por rotura y reubicándose las unidades desplazadas con respecto a su posición original.

Asimismo, el pavimento exterior ha sido reparado con una intervención que impide que el agua de las precipitaciones accedan al templo, evitando que este elemento interfiera visualmente con el templo y el entorno.

El consejero de Cultura y Patrimonio Histórico, Juan Jiménez, ha señalado además que "el contingente artístico de origen eclesiástico es el más numeroso en la Isla, por ello es necesario suscribir este convenio, para ejecutar trabajos de restauración en bienes muebles, así como en algunas estructuras como la barbacana de la Ermita de San Isidro, que data de 1764. Avanzamos así con este convenio, del que esperamos importantes avances en numerosos elementos de arte sacro de Fuerteventura".