CRÓNICA

El santuario de la Vega de Río Palmas se llenó de peregrinos por la Virgen de la Peña

Itziar Fernández 0 COMENTARIOS 19/09/2017 - 05:56

Los majoreros han celebrado con intensidad este pasado fin de semana las fiestas patronales en honor a la Virgen de la Peña, en la Vega de Río Palmas (Betancuria). El silencio habitual del santuario de la localidad se rompió con el bullicio de los peregrinos, romeros y la música en la Plaza. Una fiesta que ha reunido a miles de devotos que han acudido a venerar a la patrona con promesas, plegarias, cánticos, ofrendas y muestras de cariño. La salud es la petición más habitual, y según los peregrinos hay que acudir caminando hasta cima de la montaña, donde se erige la ermita para mantenerse sano.

Una de las vecinas más queridas y conocidas de la localidad mariana, Merceditas Cabrera Perera ha celebrado esta edición de forma especial tras reponerse de un ictus. A sus 80 años dio gracias a la Virgen por poder participar como siempre junto a su familia en la ofrenda y en todos actos religiosos y festivos en honor a la Virgen de la Peña. "Me quedé inmóvil, pero por suerte no fue a más y me he recuperado milagrosamente, y aquí estoy un año más en la fiesta más bonita del año para mí. He recibido mucho cariño de todos los vecinos, amigos y familia y estoy disfrutando como nunca", aseguró Merceditas, que acudió a la romería y ofrenda ataviada con la ropa típica canaria y con un aspecto juvenil y jovial.

El alcalde de Betancuria, Marcelino Cerdeña, destacó la elevada participación de los majoreros en la fiesta insular "una año más vemos que la fiesta la hace la gente", pero criticó "la falta de interés de instituciones como el Cabildo Insular y el Gobierno de Canarias. "Nos da mucha pena ver que en la fiesta insular faltaba infraestructura, decoración en los balcones y más presupuesto para un evento al que acude toda la población de Fuerteventura por la devoción a la Virgen de la Peña", lamentó Marcelino.

A su juicio, en cualquier otro acto festivo se gastan más dinero y "vemos que hay que mejorar en el sistema de aparcamiento, en el descanso d ellos peregrinos, generar espacios y acondicionar mejor el barranco que se llenó de arena, los coches enterrados, la gente no podía acceder con comodidad y otros detalles para realzar esta fiesta", apuntó el alcalde. "Vemos que nuestras propuestas caen en saco roto y con poco presupuesto organizamos unos actos previos como ferias y mercadillos que lograron un rotundo éxito", añade el alcalde. Por ello, asume el compromiso de continuar demandando en próximas reuniones que mejore la organización de esta fiesta que acoge a todos los majoreros en el pequeño municipio de Betancuria. "No pararemos de exigir que la fiesta tenga el realce y la grandeza que merece la patrona de la Isla en todos los sentidos", afirmó Cerdeña.

Tal y como señala Marcelino Cedeña, la participación del pueblo majorero fue la nota destacada de esta fiesta insular. La patrona de Fuerteventura recibió a los primeros peregrinos en la misma noche del jueves durante la celebración del pregón anunciador de las fiestas, a cargo de María Dolores Calero Pérez con la participación del grupo de teatro del municipio de Betancuria y la Agrupación Folclórica Mafasca en una obra teatral sobre la aparición de la Virgen de La Peña que resulto vistoso y muy entrañable. Poco después comenzó un río de peregrinos por todos los senderos de Fuerteventura en dirección a la iglesia de la Vega que continuó hasta la jornada del pasado domingo. En especial el viernes, 15 de septiembre, la afluencia de familias desde el amanecer hasta bien entrada la madrugada resultó incesante con horas de una gran acumulación de caminantes por el barranco de Betancuria, y sobre las 21.00 horas una fila de linternas iluminaron durante la tarde noche el sendero tradicional desde Antigua por la montaña hasta el núcleo histórico de la Vega. Con promesas o sin ellas el pueblo de Fuerteventura repite cada año en el tercer viernes de septiembre la tradicional peregrinación desde su hogar hasta la ermita, que se erige en el municipio histórico.

"Residimos en Puerto pero salimos desde Antigua y caminamos todo el barranco de Betancuria a la Vega con la romería en familia. He venido con mi hermana, mi tía y mi nieto Jonathan de 6 años", explica Fela Melo, que destaca el encanto de esta fiesta que se vive en el campo con las parrandas, la familia y con mucha devoción a la Virgen de La Peña. "Hemos salido a media tarde y hemos llegado con fuerza para continuar celebrando en los chiringuitos, después de visitar a la iglesia", desvela esta vecina de la capital.

Otro grupo de amigos que llegaba a la localidad al anochecer tras iniciar la caminata a media tarde desde Antigua. En el grupo una vecina de Lanzarote destaca la magia que rodea a esta fiesta: "Me ha encantado la gran cantidad de gente que viene a este lugar tan bello y el buen ambiente", afirmó. "Nos gusta porque se camina hasta el templo, y hemos salido de día para ver el camino por la montaña que es muy lindo, y tiene mucho encanto la ermita y la imagen de la Virgen" describe emocionada, Ana Patricia Checa. "Hemos caminado todos los amigos juntos Viana, Angélica y Raúl de Puerto del Rosario, aunque todos procedemos de América del Sur. Unos bocadillos y agua, paso suave, alguna parada y mucha ilusión para llegar a la cima", apunta la joven.

Más de 70 efectivos de seguridad se desplegaron para esta fiesta por las pistas tradicionales y el núcleo festivo, aunque un año más la tranquilidad reinó durante todo el fin de semana.

Los senderos más transitados

Los accesos a pie hasta la Vega de Río Palmas conectan desde tres puntos distintos de la Isla. Desde el este, a través de Triquivijate que conecta con Antigua, y desde Antigua hasta Betancuria, utilizando el camino tradicionalmente más concurrido de la peregrinación. También desde el este, dos senderos parten desde Agua de Bueyes y Tiscamanita, confluyendo en el Morro del Rincón Alto y descendiendo directamente hasta la Vega de Río Palmas.

Por el norte, el sendero parte desde Tefía para llegar a Betancuria después de ascender hasta el cruce de acceso al mirador de Guise y Ayose.

Desde el sur, existe también un camino que asciende por la Presa de Las Peñitas, pudiendo partir desde Pájara o un poco más adelante, desde Toto, y finalizando en ambos casos, directamente, en La Vega de Río Palmas. En Betancuria los romeros se desvían por el barranco restaurado y habilitado con luces para llegar directamente a La Vega, sin pisar la carretera de asfalto.

Añadir nuevo comentario