Un total de 2.331 migrantes han alcanzado las costas de Canarias a bordo de pateras y cayucos en 2019, una cifra que podría llegar a los 2.500 en la última semana del año de mantenerse la dinámica de los últimos siete días.

Así, entre el pasado 19 de diciembre y este día 25 han llegado otras dos embarcaciones a Tenerife y cuatro a Gran Canaria -la última este mismo miércoles-, cinco de ellas pateras y un cayuco, en las que viajaban 182 personas, la mayoría de origen subsahariano y magrebí.

En la última semana llegaron a la región en embarcaciones que zarparon desde la vecina África un total de 161 hombres -31 posibles menores de edad, dos niños entre ellos- y 21 mujeres, una en estado de gestación.

Con el cayuco y la patera rescatados por Salvamento Marítimo este lunes y miércoles, a Canarias han llegado durante este año 2.331 personas (353 en la provincia de Santa Cruz de Tenerife y 1.978 en de Las Palmas), que han viajado en 110 embarcaciones hasta Lanzarote (23), Gran Canaria (68), Fuerteventura (10) y Tenerife (9).

Por el incremento de inmigración, Gran Canaria revisó el pasado viernes, para actualizarlo a los nuevos flujos y dotarlo de mayores cotas de planificación y organización, su protocolo de atención sanitaria a quienes lleguen en pateras o cayucos a las islas.

Con ese fin la Gerencia de Atención Primaria de Gran Canaria se reunió con los responsables del Servicio de Urgencias Canaria (SUC) y de Cruz Roja para brindar a este colectivo "una asistencia planificada y de calidad con circuitos organizados".

Las instituciones que intervienen en la primera atención sanitaria que se presta a quienes llegan al archipiélago por vía marítima revisaron tanto la actuación inicial que realizan voluntarios, efectivos del SUC y los profesionales de las Zonas Básicas de Salud, como la que desarrolla el resto de colectivos participantes.

Además, la Gerencia ha protocolizado la atención a los más vulnerables, en especial mujeres, embarazadas y niños.