Dolores Corujo, presidenta del Cabildo de Lanzarote
Corujo: “Vamos a vencer al coronavirus juntos y luego a reconstruir nuestra vida juntos, no vamos a dejar a nadie atrás”
Dolores Corujo, presidenta del Cabildo de Lanzarote
-¿Con qué proyección de contagios trabajan las autoridades políticas y sanitarias en Lanzarote? ¿Cuándo creen que la Isla alcanzará su pico, cuántas personas podrían contagiarse en el peor escenario y cuándo estiman que podría pasar la pandemia en la Isla?
-Realizar ese tipo de proyecciones es muy complejo y más con una población tan reducida, a efectos estadísticos, como la de Lanzarote. Con nuestras cifras de afectados basta con que se contagie una familia amplia para que tengamos una subida importante. Afortunadamente, eso significa que tenemos pocos contagiados. Por eso no me atrevo a dar cifras o porcentajes estimativos. Sí sé que estamos preparados para so- portar un crecimiento importante de la cantidad de personas afectadas, pero no me parece conveniente hacer estimaciones en estas condiciones. En cuanto a señalar una posible fecha para el fin de la pandemia, sería un atrevimiento por mi parte especular con una posible fecha cuando los expertos no son capaces de hacerlo con total certeza. Si me pregunta por cuál es mi deseo, hoy mismo. Lo único cierto es que cada día que pasa es un día menos para llegar al fin de esta pandemia.
-Los responsables sanitarios han confirmado que en el Hospital Molina Orosa se pueden habilitar unas 40 camas de cuidados intensivos. ¿Se baraja habilitar espacios, como ha sucedido en Tenerife, utilizar centros médicos privados u hoteles para tratar a pacientes?
-Debido a la evolución de la pandemia en Lanzarote no parece previsible que necesitemos utilizar ese tipo de recursos. El Hospital General tiene todavía margen suficiente para acoger nuevos casos en cantidades que, insisto, no parecen previsibles a día de hoy. Por supuesto, en el improbable caso que fuera necesario recurrir a otras instalaciones, haríamos uso de cualquier recurso a nuestro alcance, tanto centros médicos privados como instalaciones alojativas. Afortunadamente, a día de hoy, nuestra situación tiene muy poco que ver con la que se vive en otros territorios en los que los sistemas públicos de salud se están viendo desbordados.
“Debido a la evolución de la pandemia en Lanzarote no parece previsible que necesitemos utilizar más recursos que el Hospital General, que tiene margen suficiente para atender nuevos casos”
-¿Qué necesidades específicas se han trasladado al Gobierno de Canarias en materia sanitaria, especialmente en relación a test o equipos de protección? ¿Se ha planteado la posibilidad de recoger muestras en vehículos, como en otras islas?
-Al igual que todos los territorios, hemos solicitados equipos de protección y material para diagnóstico. La brutalidad con la que nos ha atacado el coronavirus ha roto cualquier tipo de previsión y ha desmantelado las líneas de suministros sanitarios y digan lo que digan los profesionales de la crítica infundada, nadie estaba en condiciones de prever lo que nos ha sucedido. Estamos reaccionando y los suministros comienzan a llegar y el ritmo y la cantidad en la que lo hacen se irá incrementando en los próximos días hasta normalizar la situación. Desde los primeros compases de esta crisis ya se ha realizado la recogida de muestras desplazando al personal sanitario en vehículos evitando situaciones que incrementen el riesgo. Realizarlos desde el coche no es, en este momento, una prioridad dado el bajo nivel de afectados que presenta Lanzarote y la disponibilidad de material para pruebas diagnósticas.
-¿Qué medidas ha adoptado el Cabildo de Lanzarote en la gestión de instalaciones con personas a su cargo, como residencias de mayores y centros de menores?
-Desde el primer momento, decretamos la restricción de visitas, hasta llegar a prohibirlas totalmente en función de cómo evolucionaba la situación. Las residencias de mayores se han sectorizado, separando a las personas residentes en cuatro grupos: positivos, sospechosos con síntomas, sospechosos sin síntomas y no afectados. Por supuesto, el personal que atiende a sospechosos y afectados es diferente al que atiende a los residentes no afectados. Estos días hemos distribuido elementos de protección personal, como mascarillas, guantes, gorros, calzas y batas y hemos mantenido una intensa actividad de desinfección en la que hemos contado, además de con nuestros propios medios, con la intervención de los equipos especializados de la Unidad Militar de Emergencias. Pero la principal medida, sin duda, ha sido el traslado temporal de las personas residentes en Las Cabreras para garantizar su seguridad y poder desinfectar las instalaciones y reacondicionarlas para que todos dispusieran de habitación individual.
“Las residencias de mayores se han sectorizado, separando a las personas residentes, hemos distribuido elementos de protección personal y se ha desinfectado y reacondicionado Las Cabreras”
-Lanzarote tenía antes del estallido de la crisis del coronavirus más de 57.600 trabajadores de alta en la Seguridad Social. ¿Qué impacto cree que puede tener en el empleo, más allá de la suspensión temporal de actividades por el estado de alarma?
-Creo, sinceramente, que es demasiado pronto como para poder hacer previsiones más allá del convencimiento de que nos vamos a encontrar una situación mucho más dura que la de la pasada crisis. Además, dependerá mucho de lo que suceda en los principales países emisores y ahí las incógnitas se multiplican. Pero a diferencia de 2008, esta crisis es global no solo por los países afectados sino porque ha golpeado a todos los sectores productivos y a todas las capas sociales. Confío en que más allá de los primeros desacuerdos, Europa reaccione adoptando las medidas de carácter global que faciliten una pronta recuperación con el menor sufrimiento posible para las personas que resulten más afectadas.
-¿Ha valorado el Cabildo la habilitación de alguna línea de ayudas especial y extraordinaria para amortiguar el impacto económico de la crisis del coronavirus, especialmente en pymes y autónomos?
-A la hora de gestionar una crisis de esta envergadura hay que establecer las prioridades. Todas las administraciones hemos comenzado por las medidas de contención que van más allá de la restricción de movimientos e incluyen tareas de desinfección o dotación de material de protección y diagnóstico. Con la misma prioridad, hemos apostado por medidas orientadas a proteger a las personas más débiles y vulnerables: teléfono de apoyo psicológico, reparto de alimentos a menores con cuota cero, servicio de catering para mayores y dependientes al igual que compras básicas en supermercados y farmacias o alojamiento para personas sin techo. En cuanto a medidas de carácter económico nos hemos centrado en las urgentes: pagar rápido a los proveedores del Cabildo, dotar de liquidez a los ayuntamientos anticipando liquidaciones de la Red Tributaria, así como suspender todos los plazos en todo tipo de procedimientos con la administración. En cuanto a medidas específicas para pymes y autónomos, el Gobierno de España está adoptando las decisiones necesarias. Las medidas de carácter local tendrán que ponerse en funcionamiento el día que volvamos a la actividad. En ese momento será fundamental el impulso que puedan dar las administraciones locales a la reconstrucción de nuestra economía. Pero no es este el momento.
“A veces nos invade una cierta sensación de urgencia pero ahora toca centrarse en lo fundamental: salvar vidas y conseguir que el confinamiento dure lo menos posible”
-Por los contactos que hayan podido mantener con turoperadores y cadenas turísticas en estos últimos días, ¿con qué horizonte temporal trabajan para una vuelta paulatina a la actividad?
-Creo que tanto las administraciones como las empresas y el propio mundo científico compartimos una incertidumbre total. Es imposible señalar fechas o establecer plazos. Incluso, no creo que sea posible tratar de dibujar estrategias, más allá de principios básicos, porque no tenemos idea de la magnitud de la crisis económica a la que nos vamos a enfrentar cuando empecemos a reconstruir la normalidad ni los medios con que vamos a contar para ello. Por último, la respuesta local solo tendrá sentido en el marco de estrategias globales (de Europa, España y Canarias) que todavía están por definir. Sé que a veces nos invade una cierta sensación de urgencia, pero ahora toca centrarse en lo fundamental: salvar vidas y conseguir que el confinamiento dure lo menos posible.
-¿Cuál es la estimación actualizada de cuántos turistas se han tenido que quedar de manera forzosa en la Isla al no poder regresar a sus lugares de origen? ¿Dónde se están alojando?
-Los datos que nos suministra el ISTAC fijan una horquilla de entre 400 y 800. En esa cifra se incluyen los turistas que habían contratado largas estancias que parecen ser los más porque desde el Cabildo hemos atendido apenas a una decena de afectados. En todo caso, toca recordar que la operación de retorno de los turistas alojados en Lanzarote ha sido todo un éxito y desde aquí mis felicitaciones a todos los implicados.
“Nos vamos a encontrar una situación mucho más dura que la de la pasada crisis y confío en que Europa reaccione adoptando las medidas de carácter global que faciliten una pronta recuperación”
-¿Qué mensaje le trasladaría a la población de Lanzarote en estos momentos de tanta incertidumbre?
-Mi agradecimiento más sincero por su responsabilidad y civismo, por su solidaridad. Nuestros sanitarios pueden curarnos, nuestros policías y bomberos pueden protegernos, pero es la gente, en sus casas, la que va a derrotar al coronavirus. Por eso les agradezco su esfuerzo, me solidarizo con lo duro que se hace este confinamiento y no dejo de acordarme, especialmente, de los más pequeños y de los mayores, que tienen que estar solos precisamente porque los queremos. También quiero mandar un mensaje de esperanza: vamos a vencer al coronavirus juntos y luego vamos a reconstruir nuestra vida juntos también. No vamos a dejar a nadie atrás.
Añadir nuevo comentario