El consejero de Sanidad del Gobierno de Canarias, Julio Pérez, ha anunciado este martes que la Comunidad Autónoma propondrá al Ministerio de Sanidad su propio plan de "desescalada" del confinamiento domiciliario cuando llegue el momento, adaptado a sus peculiaridades territoriales.

Esas propuestas diferenciadas, dijo Pérez, podrán ser planteadas por otros territorios de acuerdo a sus características, según se acordó en la reciente reunión de los consejeros de Sanidad con el ministro Salvador Illa, pero siempre bajo los principios de "máxima prudencia" para no perder lo conseguido, apoyo en evidencias científicas y consenso entre las administraciones.

El consejero aclaró que el "desconfinamiento" no será tan sencillo como el confinamiento, de manera que se irá preparando para cuando llegue el momento.

Pérez, que realizó este anuncio durante una rueda de prensa en la que el Gobierno de Canarias presentó una herramienta informática para el seguimiento de los datos de la pandemia por la ciudadanía, adelantó además que a finales de esta semana o principios de la próxima empezarán a realizarse las pruebas rápidas para la detección del virus, de las que Canarias dispone de 8.200.

Los denominados test rápidos, que detectan anticuerpos y son fiables para los casos positivos pero no tanto para los negativos, permitirán "aliviar" el trabajo de los laboratorios que analizan los test PCR que se realizan ahora.

Los test rápidos se aplicarán a la población en función de criterios técnicos basados en sintomalogía previa y vulnerabilidad a la enfermedad y serán de "gran valor informativo sobre la parte de la población ya inmunizada", dijo el consejero.

En general, explicó que las pruebas se hacen en función de criterios establecidos por los técnicos sanitarios y por el momento los sospechosos asintomáticos (unas 4.000 o 5.000 personas) solo son objeto de control y monitorización telefónica.

El consejero indicó que la posibilidad de que casos asintomáticos que no puedan aislarse adecuadamente en sus propios domicilios sean reubicados en hoteles es un planteamiento que estudia el Ministerio de Sanidad pero como recomendación, no como obligación, y que la Consejería va a empezar a trabajar en ello.

Recordó que Canarias está aplicando ese criterio para que los sanitarios que lo requieran puedan utilizar los hoteles escuela.

En cuanto a la posibilidad de que la población en general tenga que usar mascarillas, el consejero no se pronunció abiertamente, pero adelantó que si eso se llega a producir se hará cuando haya suficientes para todos.

De momento, la Consejería cuenta con mascarillas suficientes para proveer al personal sanitario, aclaró.

Julio Pérez insistió en que no hay certezas sobre la superior incidencia del coronavirus en Tenerife, donde se concentran el 65 por ciento de los positivos de Canarias mientras que Gran Canaria, con similar población, solo tiene el 25 por ciento.

Indicó que la posibilidad de haya relación con la concentración de personas en los carnavales en Tenerife es "una hipótesis tentadora", porque el virus es muy contagioso cuando hay proximidad física, pero "puede haber otras hipótesis" y por el momento no hay "evidencia científica" al respecto.