La Consejería de Turismo del Gobierno de Canarias ha iniciado los trámites para solicitar a Bruselas un plan de incentivos con carácter urgente a las aerolíneas para recuperar rutas aéreas, dentro del programa de reactivación turística en el que trabaja la comunidad autónoma.

La consejera de Turismo, Industria y Comercio, Yaiza Castilla (Agrupación Socialista Gomera), explica que, antes de la covid-19, el archipiélago contaba con una red que conectaba las islas con 150 aeropuertos de 27 países diferentes mediante unos 350 enlaces directos, así como con unas 20 millones de plazas aéreas de llegada al año.

Sin embargo, la irrupción del coronavirus y las restricciones a la movilidad y el cierre de fronteras han supuesto la pérdida inmediata de toda la red de rutas aéreas de Canarias "que tantos años costó establecer", añade.

Para la recuperación turística es urgente restaurar la conectividad aérea de Canarias por lo que, explica, se ha propuesto a Bruselas un programa "de emergencia" dada su implicación en la recuperación de la economía "y que nos permitiría corregir las desventajas como región ultraperiférica, y ayudar a impulsar la recuperación de la conectividad aérea hacia las islas hasta niveles anteriores a la crisis".

Yaiza Castilla subraya que la recuperación del destino dependerá de la capacidad aérea de Canarias, de los destinos competidores y de la demanda de viajes, "sobre la que pesa la reducción de rentas disponibles y el miedo al contagio".

Todos estos elementos "son ajenos a nuestro control y, en estos momentos, arrojan muchas incertidumbres sobre la recuperación turística, pero no por ello deben paralizarnos. Todo lo contrario", argumenta la consejera.

Castilla también ha indicado que se trabaja en una estrategia promocional para "captar nuevos visitantes turísticos de más larga estancia, que deje en las islas mayores rentas".

La estrategia, cuyo diseño se ha encargado a la empresa pública Promotur Turismo de las Islas Canarias, se centrará en dos segmentos potenciales de turistas, como son los relacionados con el teletrabajo y el denominado turismo 'silver', un nuevo grupo social senior, a medio camino entre el retiro y el trabajo, y ambos con rentas y tiempo disponible para poder fijar estancias temporales en las islas.

Son clientes de larga estancia, en el caso de las personas que trabajan en remoto, también conocidas como 'nómadas digitales', y con una estancia media de dos a tres meses, o el turismo 'silver', personas de a partir de 60 años con la vida laboral resuelta, jubilados o próximos a hacerlo, con una estabilidad económica y con disponibilidad de tiempo.