La confianza de los empresarios en Canarias de cara el segundo trimestre de este año ha disminuido un 29,9 por ciento respecto al primero, al pasar de los 122,2 a los 85,7 puntos, una caída que a nivel nacional ha sido del 26,9 por ciento, la mayor de la serie histórica que comienza en 2013.

El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha publicado este jueves el Índice de Confianza Empresarial Armonizado (ICEA), que se sitúa en el 95,5 en el segundo trimestre de 2020, también el valor más bajo del histórico.

El INE señala que la recogida de la información para elaborar este indicador se ha llevado a cabo del 16 de marzo al 3 de abril, después de la declaración del estado de alarma por la pandemia del coronavirus.

La confianza empresarial ha empeorado en los cinco sectores de actividad analizados, pero más entre los directivos de transporte y hostelería (-32,4 por ciento), seguidos por los de la construcción (-29,3 por ciento) y los otros servicios (-27 por ciento); en tanto que se ha deteriorado menos entre los dedicados a la industria (-23,3 por ciento) y el comercio (-25,4 por ciento).

La pérdida de confianza es inversamente proporcional al tamaño de la empresa, siendo los empresarios de compañías con menos de 10 asalariados los que presentan el mayor descenso (-28,7 por ciento), en tanto que aquellos con más de 1000 asalariados registran la menor bajada (-22,0 por ciento).

Por regiones, la confianza empresarial desciende en todas, siendo mayores los que se producen en Cataluña (-30,2 por ciento), Baleares (-30,1 por ciento) y Canarias (-29,9 por ciento).

De cara a este trimestre que comienza, sólo el 3,1 por ciento de los gestores de establecimientos empresariales considera que la marcha de su negocio será favorable, mientras que el 75,1 por ciento opina que será desfavorable y el 21,8 por ciento restante cree que será normal.

La diferencia entre el porcentaje de respuestas favorables y desfavorables, denominada balance de expectativas, se sitúa en -72,0 puntos, frente a los -5,9 del trimestre anterior, de forma que marca también el valor más negativo del histórico.