El grupo parlamentario de Podemos ha exigido este martes al Gobierno que preside Fernando Clavijo (CC) que “ejerza la competencia que le corresponde y deje ya de escurrir el bulto” a la hora de “frenar los actos vandálicos contra el patrimonio arqueológico aborigen poniendo en marcha medidas de protección” de los yacimientos”.

“Sabemos que pedirle esto a quienes están a favor del proyecto de Chillida en Tindaya, que es el mayor atentado contra el patrimonio aborigen que se conoce, es pedirle peras al olmo, pero afortunadamente aún tienen la oportunidad de demostrar lo nacionalistas que son, protegiendo lo que es único, irrepetible y especial, aunque ustedes aún no se lo crean”, ha asegurado la diputada de Podemos por Fuerteventura, Natividad Arnáiz, durante la sesión de control al Gobierno.

Arnáiz, que ha preguntado al gabinete de Clavijo sobre qué acciones tiene previsto llevar a cabo “para restaurar y evitar nuevos actos vandálicos” como los acontecidos recientemente en Montaña de Jaifa, en Fuerteventura, y Órzola, en Lanzarote, ha insistido en que “la propia Ley vigente de Patrimonio, en su artículo 6, les deja bien claro cuáles son sus competencias”.

“Está claro que este tipo de actuaciones no son más que la consecuencia de la escasa inversión en cultura patrimonial, de gobiernos irresponsables que, por un lado están fomentando el odio en la población y, por otro lado, no protegen de manera eficaz y decidida la cultura más ancestral, la cultura que nos define como comunidad”, ha insistido la diputada de la formación morada al consejero Isaac Castellano.

Arnáiz ha recordado que los yacimientos contra los que se han atentado están constituidos por caracteres líbico-canarios o líbico-latinos, por ser exclusivos de las islas de Fuerteventura y de Lanzarote, y son objetos claves de investigación para conocer el origen del poblamiento humano de estas dos islas.

“Aquí pedimos que de inmediato restauren los daños producidos por estas agresiones y que frenen este tipo de actos con medidas de protección, porque es posible que se esté produciendo un ‘efecto dominó’. No esperamos a que sea demasiado tarde y los daños lleguen a ser irreversibles”, ha concluido.