Un año más, las Fiestas en honor a Nuestra Señora de La Peña congregaron en torno a la ermita de la Vega de Río Palmas a miles de romeros reunidos allí a lo largo del fin de semana para festejar las tradiciones y el punto de encuentro con la identidad majorera. El presidente del Cabildo de Fuerteventura, Marcial Morales, señala al respecto cómo "La Peña es el punto de tradición que nos permite seguirnos arraigando en una isla que está abierta al mundo. Donde renovamos el compromiso de seguir haciendo de Fuerteventura un lugar de solidaridad con aquellas personas que aunque se hayan quedado un poco atrás, por las razones que sean, siguen formando parte de este proyecto colectivo que es Fuerteventura''.

''Hemos tenido una magnífica fiesta, donde la noticia ha sido la tradición, la cultura, la religiosidad, el encuentro entre todas aquellas personas que sentimos Fuerteventura'', continúa. ''Y durante estos días hemos tenido la oportunidad de arraigarnos en la tradición y cargarnos de energía para los compromisos que nos aguardan y a los que tenemos que seguir dando respuesta, especialmente a la distribución del bienestar entre aquellas personas a las que aún éste no ha llegado'', concluye.

Tanto la Romería-Ofrenda como el resto de actos transcurrieron sin más incidencias que las que propiciaran las altas temperaturas. El calor ralentizó durante la tarde la afluencia de los peregrinos, que concentraron su llegada a la Vega a partir de las horas del ocaso; y sus efectos requirieron algunas asistencias sanitarias por lipotimias y golpes de calor, quince en concreto. Desde la consejería de Seguridad que dirige José Roque Pérez hacen un balance positivo, al no producirse ningún incidente destacable en materia de orden público, ni asistencias que precisaran evacuación al Hospitalito instalado en la Vega ni a ningún otro centro sanitario. Además, destaca Pérez, 'no hubo una sola incidencia con menores de edad por consumo de alcohol o sustancias prohibidas''.

El consejero de Cultura, Juan Jiménez, señala cómo 'este año, las fiestas han supuesto ahondar en el reforzamiento de un símbolo de identidad y, al mismo tiempo, un rito iniciático para muchos jóvenes que han vivido su primera experiencia en La Peña. Quienes ya hemos transitado los caminos sabemos de su significado y su trascendencia, de la necesidad de sentirse parte de lo que nos ha hecho pueblo. Y sabemos lo que es vivir la peña con la paz de los pasos que podemos dar en los infinitos senderos de nuestra isla, que en septiembre llevan a Río Palmas''.

La noche del jueves, la Agrupación Folclórica de Tetir, encargada este año del pregón, ofreció a los asistentes una recreación de la peregrinación de antaño, de la Vega de Tetir a la de Río Palmas, que combinó la narración oral con los cantos y bailes tradicionales. Una puesta en escena original que a nadie dejó indiferente.