La economía canaria necesitará 18.146 millones de euros de dinero público y otros 400 millones de fondos privados para recuperarse de los perjuicios socioeconómicos de la crisis del coronavirus, según los cálculos de Nueva Canarias, que ha presentado aportaciones al Plan de reconstrucción hecho público días atrás por el presidente Ángel Víctor Torres (PSOE), que ascendía a un montante global de 14.250 millones.

Según Nueva Canarias, serían necesarios en realidad 18.500 millones de euros. El Gobierno de Canarias, de acuerdo con las estimaciones de NC, tendría que aportar 8.372 millones de euros, el Estado 5.541 millones, los ayuntamientos 2.273 millones y los cabildos 1.960 millones, una suma que supone casi el doble del presupuesto consolidado autonómico para 2020, que llega a los 9.500 millones.

El uso del superávit, el endeudamiento a largo plazo y una reconstrucción económica basada en la sostenibilidad son los ejes del planteamiento de Nueva Canarias ante el Pacto para la Reactivación Social y Económica de Canarias promovido por el ejecutivo regional.

La viabilidad de estas propuestas dependen de la autorización del uso del superávit y el endeudamiento a largo plazo de los ayuntamientos, los cabildos y el Gobierno de Canarias, lo que serviría de "contrapeso" a pérdida de ingresos tributarios y evitaría una política "austericida" de recortes como la aplicada en 2008, argumentan los nacionalistas.

NC proyecta un futuro tras la pandemia "basado en el desarrollo sostenible", con una reordenación de estructuras entre comunidad autónoma, cabildos y ayuntamientos basada en "la simplificación y la coordinación administrativa".

También debe basarse la salida de la crisis en el "fortalecimiento del autogobierno" asentado en el Régimen Económico y Fiscal (REF), el Estatuto de Autonomía y el reconocimiento jurídico de Región Ultraperiférica de la Unión Europea (UE), según la propuesta de NC.

Este partido plantea "una apuesta clara por los servicios públicos fundamentales como son la sanidad, la educación y los derechos sociales, incluida la dependencia y la vivienda", el refuerzo de "las capacidades sanitarias y sociosanitarias" y "la atención y apoyo a las personas más vulnerables".

También incide en la recuperación del empleo, el impulso de la actividad económica para las empresas y los autónomos y el apoyo al turismo, comercio, industria, construcción, sector primario y transporte.

Para financiar estos planes de reconstrucción, NC cuenta con 1.000 millones de euros del convenio de carreteras y dotaciones presupuestarias estatales, incluidas los programas sectoriales del REF y "un trato diferencial con transferencias adicionales por la singular estructura productiva y mayor incidencia de la crisis en las islas".

En la propuesta de NC, los fondos del Ejecutivo canario, los cabildos y los ayuntamientos se han contabilizado casi en su integridad, es decir, sin descontar la pérdida de ingresos tributarios, que se equilibraría con la autorización estatal para el uso del superávit y los remanentes y para el endeudamiento a largo plazo.

El Estado "ha de asumir con urgencia nuestra reclamación ya que es preciso contar con liquidez para seguir prestando servicios, garantizar la inversión y articular medidas de estímulo y de respuesta social a esta crisis", plantea Nueva Canarias.

Este plan de recuperación necesita de "un compromiso firme y prolongado" en la sociedad para abordar cuestiones siempre relegadas como la diversificación económica, el desarrollo de las energías renovables, la movilidad sostenible, la lucha contra el cambio climático y el fortalecimiento del sector primario y del sector cultural.